Con MARIANA GARZÓN ROGÉ (*)
Estamos próximos a festejar los 75 años del 17 de Octubre de 1945, y creemos que es conveniente, a pesar del vértigo que nos imprime la vida de hoy, tan tecnológica y virtual, hacer un alto; mirar hacia atrás y ademas de festejar y honrar la historia, recordar aquella gesta donde el pueblo trabajador adquirió para siempre el reconocimiento social.
La historia es la ciencia que tiene como objeto de estudio el pasado de la humanidad y como método el propio de las ciencias sociales.
La finalidad de la historia es explicar el presente, decir por qué el mundo que nos rodea es como es. La historia nos cuenta qué es importante en nuestro mundo, y cómo ha llegado a serlo. Nos cuenta por qué las cosas que valoramos son las cosas que debemos valorar. Y nos cuenta qué ha de pasarse por alto o desecharse. Eso es verdadero poder, un poder profundo. El poder de definir a toda una sociedad.
El peronismo como “hecho maldito del país burgués” es, para Cooke, la identificación de la clase obrera con el Frente Nacional contra el imperialismo –disuelto entre finales del régimen nacido en 1945 y los comienzos de la Revolución fusiladora- que, en su concepción, sintetiza el peronismo.
De esta manera Cooke postulaba al peronismo como sinónimo de la clase obrera, ya que era el sujeto esencial que mantenía en la escena política al movimiento proscripto.
También otros se han referido a la fecha, Raúl Scalabrini Ortiz, memorando el 17 de Octubre de 1945 dijo: “Era el subsuelo de la patria sublevado” y lo fue, porque eran los trabajadores de overol los que entraban por la puerta de nuestra historia diciendo presente, acá están los que con nuestro trabajo generamos las riquezas, ponemos en marcha al país, y a cambio, recibían salarios paupérrimos, con lo que tener un trabajo no garantizaba salir de la pobreza. El mérito indudable de ese peronismo fue darle un lugar en la mesa de discusión de cómo se distribuye lo que se produce, que el país nos pertenece a todos.
Nos vitorearon “Viva el Cáncer”, y aquí estamos. Nos tiraron bombas, y aquí estamos. Nos fusilaron, y aquí estamos, nos proscribieron, y aquí estamos. Nos persiguieron, nos torturaron, nos desaparecieron, nos mataron y aquí estamos.
Consultamos a Mariana Garzón Rogé quien con absoluta generosidad nos contó desde la ciencia social lo que paso el 17 de Octubre de 1945.
(*)Es investigadora asistente del CONICET. Es doctora en Historia por la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires. En su tesis de doctorado abordó los años de la Revolución de Junio y del primer peronismo en Mendoza. Además, es licenciada en Comunicación Social por la Universidad Nacional de Cuyo.