Marzo, el mes de la memoria. Mes en el que echamos luz sobre las sombras que suelen aparecer en momentos de oscuridad. La actualidad que nos atraviesa hoy es esa: en lugar de hacer tapa con la emblemática marcha del 24, los mismos medios hegemónicos la tapan. Sin embargo, la realidad supera a la ficción, y a 43 años de la última dictadura cívico-militar, miles de voces peronistas gritaron por las calles mendocinas «¡NUNCA MÁS!».
El peronismo marchó detrás de la bandera del Movimiento Nacional Justicialista, encabezada por el presidente del PJ Mendoza, Guillermo Carmona; el precandidato a gobernador Alejandro Bermejo y demás dirigentes, representantes legislativos, sindicalistas y militantes de todos los sectores. Atrás le seguía todo el movimiento unido coreando las canciones que la JP entonaba: «¡A pesar de las bombas, de los fusilamientos / los compañeros muertos, los desaparecidos / no nos han vencido!».
Entendemos que muchos de los que nos gobiernan hoy son los civiles de la dictadura militar. Son los que sacaron tajada favoreciéndose del genocidio más sangriento que hemos sufrido. Los cómplices, los del indulto, los de la vista ciega y el oído sordo. Por eso, en los tiempos que corren, reivindicar las luchas de los/as 30 000 compañeros y compañeras desaparecidos/as es un deber peronista.
Marchar en unidad justicialista fue todo un símbolo para esta fecha tan sentida. Acompañar a las Madres, Abuelas e Hijos es tarea diaria en la construcción del país y la provincia que queremos. Es hacer de la memoria nuestro presente para poder proyectar un futuro digno y justo.
Así fue como se marchó, transformando la tristeza en lucha alegre, porque nada heroico se puede hacer si no es con alegría. Vimos a Alejandro Bermejo tocar el bombo peronista con la JP, se escuchaban los cantos compartidos, se veían los abrazos entre sonrisas de compañeros y compañeras.
La marcha culminó en Casa de Gobierno, pero las actividades por el mes de la Memoria le siguieron en cada PJ departamental. Se realizaron charlas, muestras, mateadas, encuentros donde tomaron la palabra ex presos/as políticos/as y se trabajó para seguir construyendo el futuro sobre la base de la verdad y la justicia. Sabemos que un pueblo sin memoria está condenado a repetir todo aquello que tanto daño ha dejado.
Se viene dando un trabajo colectivo en el PJ, en la construcción del futuro que se diseña en cada encuentro. El movimiento todo entiende que la memoria es unos de los pilares que sostienen toda esa proyección hacia una sociedad mejor. El Nunca Más no implica solamente que nunca más los militares nos arrebaten una generación, sino también que nunca más nos gobiernen sus cómplices. Que nunca más la policía reprima a trabajadores o se lleve detenidos a vendedores ambulantes.
Como dijo Carlos Alberto “Indio” Solari, la vida se pone difícil cuando un gobierno le da piedra libre a la policía. Es lo que hoy sucede. Por eso, el peronismo provincial debe seguir trabajando para que la vida sea fácil para los y las mendocinos/as.